Si tenemos todo organizado y accedemos a toda la información de manera fácil y rápida, ganaremos mucho tiempo y ahorraremos recursos en nuestra empresa. Un ERP es clave para poder tener los datos centralizados y actualizados y así evitar duplicidades, trabajo doble, pedidos erróneos, retrasos en los cobros y pagos, frustración y ganar en competitividad, ventas, clientes felices…
Procesos que mejoran las empresas con un ERP
El hecho de implantar un ERP en una empresa, sobre todo una pyme que debe optimizar aún más si cabe recursos, es el resultado de tener todo en uno, la gestión de compras y ventas, establecimiento de comisiones, administración de cobros y pagos, control de stocks, optimización de costes y aumento de beneficios, entre otros factores.
Gestión y control de las ventas
Gracias a una solución de ERP, todos los documentos de los procesos como por ejemplo, presupuestos, facturas de ventas, pedidos, movimientos de almacén, queda registrado y disponible de manera actualizada por lo que podremos tomar decisiones rápidamente en base a toda esta información recabada, precisa y actualizada.
Gestión y control de las compras
Se realizan pedidos automáticos a los proveedores según los máximos y mínimos, se puede controlar también el consumo, los pedidos de los clientes y demás porque el ERP permite registrar de manera rápida todas las entradas y salidas de mercancías, consultas de albaranes y facturas y todo esto gestionando el área administrativa mediante el software de facturación por ejemplo. Desde el mismo, se pueden consultar y registar todas las facturas, modificar albaranes.
Control y gestión de stocks
Como hemos comentado, el ERP también puede gestionar y controlar la cantidad de stock que tenemos disponible en el almacén, los movimientos de salida y entrada de pedidos.
Control y gestión de comisiones
Se puede definir, calcular y controlar las comisiones de venta por representante. Un software de gestión ERP nos ayuda a determinar la duración del período acumulable, comisiones correspondientes en base a las ventas realizadas, realizar la contabilización del devengo y del pago, podemos obtener listados en función de lo cobrado, lo que esté pendiente de cobro, fechas, vendedores y demás. Y no solo eso sino que también facilita el recálculo de las comisiones.
Gestionar los cobros y pagos adecuadamente
Al contar con un software ERP conseguimos automatizar todos los cobros y pagos al milímetro por lo que el margen de error es ínfimo comparado con el hecho de tener que realizarlo de manera manual y aquí puede influir el error humano y descuadrar la contabilidad. Además, podremos llevar al día toda la contabilidad por lo que nos adelantaremos a tomar decisiones ya que sabremos con seguridad qué inversión o gastos tenemos.
Actualizar la relación con los bancos
Llevaremos toda la gestión con la banca de manera actualizada. Gracias al ERP tendremos todas las cuentas bancarias optimizadas además de que será mucho más claro y simple acceder a toda la gestión de dichas cuentas bancarias como por ejemplo un histórico de las cuentas, los límites de crédito que tengamos, el nivel de riesgo de negociación, estudios y previsiones, extractos bancarios, intereses y demás.
Declaraciones
Podremos gestionar todas las declaraciones que deba realizar la empresa a golpe de click además de que tendremos un calendario fiscal para poder planificar todas las declaraciones que estén pendientes y poder saber cuáles son las que ya han sido presentadas. Obtener por tanto un histórico bajo control conseguirá que evitemos cometer errores con este tipo de procesos. No solo esto sino que también el ERP nos ofrece la posibilidad de ampliar la emisión de libros, obtener certificados de retenciones y liquidaciones de los impresos oficiales de IVA u otros impuestos para poder presentarlo de manera telemática.