Internet es un entorno en constante mutación. Lo que es válido para hoy, tal vez no lo sea para mañana. Pero si algo podemos tener claro es que es constituye un canal excepcional para promocionar un servicio, una empresa o un producto. Hablamos, claro, de marketing digital, o lo que es lo mismo, la explotación publicitaria de los recursos que ofrecen internet y las nuevas tecnologías.
Las inmensas posibilidades que tiene internet como herramienta de marketing explican también su complejidad.
Muchos emprendedores que han montado su propio negocio se lanzan a propagar su mensaje a través de la red. Pero no todos manejamos de forma eficiente los recursos propios del marketing digital. Por eso, los expertos en publicidad en internet y social media marketing aconsejan que acudamos a un profesional.
¿Qué puede suceder si nos ocupamos nosotros mismos de la estrategia de marketing online de nuestro servicio? Que gastemos el tiempo sin conseguir nuestros objetivos, que suelen ser alcanzar una mayor visibilidad para el proyecto y un acceso a un mayor número de clientes. Obviamente, también podemos ocuparnos nosotros. Si tenemos una experiencia en este campo, los resultados, a buen seguro, serán más positivos.
Posicionamiento web
Una de las estrategias básicas del marketing online es el posicionamiento en buscadores, esencialmente en Google. El gigante de Mountain View maneja su famoso algoritmo en torno al que gira la posición de los enlaces tras la búsqueda de un usuario.
“¿Por qué mi blog está en la tercera página y un artículo de El País aparece como primera referencia? Así nadie entrará en mi blog”.
Este es un ejemplo de lo que podemos escuchar sobre este asunto. Tal vez el artículo del blog sea más interesante que el del diario, pero pocos lo van a leer porque un porcentaje muy pequeño de internautas pasa a la página 3 del buscador.
¿Qué debe hacer el dueño de dicho blog? Optimizar su posicionamiento. ¿Cómo? Mejorando sus estrategias SEO (Search Engine Optimization). Como indica la denominación, el SEO se ocupa de optimizar la presencia en los motores de búsqueda.
Muchas personas que trabajan en entornos digitales deben tener nociones SEO, pero si lo que buscamos es asegurar la presencia de nuestro servicio, producto o tienda online en la primera página del buscador, lo más adecuado es acudir un experto SEO, de los muchos que existen en la actualidad.
El problema de la estrategia de posicionamiento web es que Google cambia periódicamente sus fórmulas y debemos estar muy atentos a esos cambios. Lo que decíamos al principio: lo que hoy vale, tal vez mañana no. Es un trabajo muy específico que requiere de conocimientos especializados si el proyecto en el que estamos es serio y queremos resultados rápidos.
Social Media Marketing
El otro canal asociado a internet que deberás tener en cuenta a la hora de promocionar tu proyecto son las redes sociales. De crecimiento exponencial en los últimos años, a estas alturas casi ninguna empresa se lo piensa dos veces a la hora de tratar de conquistar Facebook o Twitter.
Una presencia fuerte en estas dos redes sociales asegura una visibilidad única. Y aquí entra la figura del community manager, el encargado de gestionar la comunidad de seguidores de una marca.
Otros tipos de publicidad en internet
Un experto SEO, un community manager, un especialista en marketing digital, un diseñador web… Pocos emprendedores se plantean al comenzar su proyecto contratar una decena de trabajadores. Si nuestra idea es menos ambiciosa podemos optar por otro tipo de publicidad, sin descuidar nunca lo descrito más arriba, como campañas en Adwords o colaboraciones con otros blog del sector donde necesitaremos conocer un poco la terminología que pueden llegar a usar.
- Google Adwords. Una estrategia de marketing online muy común en la red.
- Banner. ¿Quién no conoce este tipo de publicidad? Hubo un tiempo en que las páginas estaban plagadas de banners. Todavía siguen siendo muy útiles para redireccionar a un internauta hacia la web deseada.
- Botón. El minibanner, en formato pequeño (90×90)
- Megabanner. Banner de mayor tamaño que suele aparecer en la cabeza o en la parte inferiores de las páginas web.
- Skyscraper. Interesante banner vertical que se coloca en los laterales. Como el resto de banners, pueden ir animados. Un buen diseño de este tipo de publicidad, huyendo de las soluciones recargadas, pueden ser de gran efectividad.
- Interstitial. Ocupan toda la página. Atención a estos, porque además de ser demasiado agresivos, pueden ser penalizados por Google, como ocurre con los enlaces a la descarga de aplicaciones. Colocar un insterstitial en una web prestigiosa vale mucho dinero.
- Pop-up. Otra solución agresiva que muchos internautas odian porque obliga a cerrarlo o entrar en la web en cuestión. No obstante, bien usados, pueden ser muy útiles para publicitar nuestro proyecto.
Internet cambia constantemente. Si pretendemos que nuestro negocio tenga buena visibilidad en le red, debemos estar en constante adaptación a las novedades. Cuesta, pero es el único camino…